Foto y texto: Ocio y más Madrid.
Una tarde de domingo lluviosa mejora con la carcajada y la risa continua conversando sobre sexo y muchos temas más. El Nuevo Teatro Alcalá se convierte en aula improvisada en la que asistimos a un curso de formación para tranformarnos en expertos vendedores en reuniones de “tuppersex”. Una atractiva propuesta -cuyo artífice es Edu Pericas, director de la recordada obra “Confesiones de mujeres de 30”- que desde el primer minuto logra la complicidad del público asistente, de los alumnos que escuchan atentos los secretos de un negocio plagado de tabús. La profesora, aparentemente centrada, encierra sorpresas que se irán desvelando a medida que transcurran los minutos. En todo este caos la peluquera pseudopsicóloga “Mamen”, con su lenguaje atrevido y sonrojante en ocasiones, nos guía por un laberinto de hilaridad que se nos hace corto y ameno.
Se agradece el gran trabajo desarrollado por las actrices protagonistas (Roma Calderón y Alicia Garau) interpretando un texto que controlan a la perfección, manejando los tiempos y las réplicas con absoluta profesionalidad. Y se agradece el no utilizar al público como en ciertos espectáculos para “ridiculizar”, haciéndole sentir incómodo: en “Tuppersex” nadie se ríe de nadie y todos nos reímos haciendo el humor.
