El Teatro Alcázar de Madrid acoge con los brazos abiertos la llegada de “Paso a paso”, comedia escrita por Peter Quiller y dirigida por Esteve Ferrer, ‘alma mater’ de grandes éxitos teatrales en los últimos tiempos.

El cuarto amigo

El público se convirtió durante los 90 minutos de la representación en el ‘cuarto amigo’ de Paula, Sofía y Mónica -y de la malograda Rebeca-. Asistimos a un canto a la amistad imperfecta, como debe ser, en una escalada hacia la cumbre en la que descubrimos entusiasmados la personalidad cautivadora y elocuente de las amigas en una hilarante ascensión a la cima durante varias etapas, que como la vida misma, no son nada fáciles. Cada mochila lleva su carga emocional, repleta en ocasiones de secretos y sobre todo de recuerdos que alimentan más que los energéticos dulces que aumentan la glucosa durante la larga caminata.

Después de la tormenta…

“Paso a paso” nos recuerda que tras la tormenta llega la calma, que tras los fracasos llegan los triunfos y que las amistades no deben ser tóxicas -y que hay que cuidarlas y mimarlas para mantenerlas vivas-. Los miedos y los pensamientos negativos deben ocupar el tiempo necesario para que no nos impidan ver un paisaje agreste, esperanzador y feliz, gracias a los compañeros de viaje.

Actrices de hoy en día y para siempre

Nos encantó ver que Diana Peñalver conserva la sonrisa, el entusiasmo y la dulzura de sus inicios: su esencia (y profesionalidad) se mantiene intacta y lo mismo puede participar en una película de zombies, como ser una chica-de-hoy-en-día.

En su periplo por la montaña le acompaña otra chica 2.0, la genial Carmen Conesa, en el papel de una amiga alocada a punto de casarse.

El trío lo completa Eva Barceló quien se ganó a la platea con desternillantes frases y con gestos cargados de una gran comicidad.

“Paso a paso” puede verse en el Teatro Alcázar de Madrid hasta el 20 de agosto.